ASAMBLEA DE QUITO
Puntos de reflexión – Por Rocío Bastidas Granizo
- ¿Qué es la Asamblea de Quito?
- Es el espacio interactivo de actores políticos donde debaten, reflexionan y toman decisiones sobre los problemas de la ciudad.
- “Es la máxima instancia de participación ciudadana en el DMQ, de carácter proponente, recogerá las discusiones, deliberaciones y aportes de la ciudadanía, propendiendo a trabajar sobre los acuerdos, procesar y transparentar los conflictos”. (Art.53 OM 102 del 3 de marzo del 2016)
- ¿Para qué la Asamblea de Quito?
- Ejercer la democracia directa y participativa
- Definir las políticas para la ciudad
- Explicar los ejercicios presupuestarios como rendición de cuentas
- Para aprobar las líneas económicas y financieras para la ciudad (tasas, impuestos, etc)
- ¿Por qué la Asamblea de Quito?
- Impide la improvisación en la planificación de la ciudad
- Definen las obras prioritarias para que dejen de ser clientelares
- La ciudadanía tiene derecho a la ciudad y por lo tanto en la toma de decisiones
- La transparencia es la mejor herramienta para juzgar a cualquier administración
- ¿Cómo funcionaría la Asamblea de Quito?
- De abajo para arriba, es decir desde lo unidad mínima de planificación que es el barrio y la comuna, hasta la división zonal del Distrito, Con temas comunes y no comunes, con representantes salidos de los barrios unidos según los problemas compartidos y con propuestas de proyectos grandes, medianos o pequeños para presentar en el pleno de la asamblea. Esta tarea debe ser canalizada bajo una metodología especial.
- ¿Quiénes participarían en la Asamblea de Quito?
- Todos los actores políticos y ciudadanos, con representación social.
- ¿Cuáles serían los resultados esperados de la Asamblea de Quito?
- Lineamientos de políticas macro, meso y micro para implementar en los distintos niveles de gobierno.
Por Pamela Mendieta, Arquitecta, activista en temas urbanos y de movilidad sostenible
Durante los últimos 7 años me he involucrado en temas sociales con barrios en temas coyunturales que potencialmente cambiarían su calidad de vida o situación de vivienda.
La gobernanza actual no permite que la voz de afectados puntuales, se escuche, ya que priman intereses económicos mayores.
La Ordenanza 102 es una potencial puerta abierta, pero no existe lógica de empoderamiento de parte del Municipio ni la ciudadanía. Aún hay mucho que trabajar para que la gente despierte.
Mi presencia quiere ser una invitación a todos los colegas para que participen en las asambleas de barrios que se han conformado. Al momento solo 147 de 2.800 barrios forman parte de la Asamblea de Quito.
Existen 80 curules que vocearan propuesta, propondrán cambios, que potencialmente generarán tendencia ciudadana de desarrollo de la ciudad, por lo que hay que intentar influenciar la toma de decisiones informadas.
Como gremios podemos convertirnos en aportes a las gobernanza local, para que la gente, asambleas, barrios, cuadras mejoren la capacidad técnica en sus propuestas, para que el Municipio las recepte, y se desarrollen las ideas comunes de los ciudadanos.
Es necesario despertar en la sociedad en general la noción de que los arquitectos sí estamos para ayudarles. Retomar la conciencia social de nuestro servicio. Nos hemos olvidado del espacio público, y hemos trabajado de línea de fábrica para adentro. Y lo grave es que el problema se encuentra principalmente en lo público como ciudad.
La Asamblea Ciudadana de Quito es una oportunidad muy grande. Generar una tendencia ciudadana que despierte a una co-responsabilidad. Se puede entrar a topar temas y propuestas de cambio sobre lo que funciona o no funciona en el Municipio. Por ejemplo proponer que los Administraciones Zonales sean elegidos bajo elección popular y local. Este tipo de gobernanza permitiría una rendición de cuentas mucho más directa y real. Con este mecanismo puedo tal vez elegir a mi vecino, y esta lógica debería llevarnos hacia una posibilidad de que el ciudadano tenga una respuesta directa e inmediata a su necesidad o propuesta.
Invitarles de nuevo al activismo. Tenemos un par de páginas en las redes sociales que se mueven en estos temas. Quito Yo me Apunto, espacio como plaza virtual donde se dan muchas conversaciones, a veces mucho es queja porque no se ha podido dirigir la propuesta. El otro espacio es la Red de Urbanista del Ecuador, que cuenta con interdisciplinariedad para tener una visión de ciudad mucho más amplia y más allá de lo construido.
La representación del CAE de los gremios de profesionales, podría ser un apoyo inmenso a la comunidad y poder proponer a través de esas bases sociales una propuesta puntual y local con una visión más amplia de ciudad.
Aunque es frustrante la participación, es vital. La presión social es necesaria, poder relacionarte con los temas ajenos. Hemos perdido la empatía y debemos recuperarla. No solo cuando te toque el problema se debe reaccionar, porque ahí se darán cuenta que el problema es que nadie reacciona y pocos apoyan.
Invitarles de nuevo al activismo desde el m2 que se encuentre cada uno.