En países como Colombia o Argentina, y muchos otros en el mundo, la mayoría de la obra pública se hace mediante concursos de diseño y planificación. En Ecuador esta práctica es casi nula, ya que se desconocen las ventajas de un correcto proceso de planificación y diseño arquitectónico.

La Arq. María Samaniego, presidente del Colegio de Arquitectos del Ecuador (CAE) y provincial Pichincha (CAE-P), hace un llamado a instituciones públicas y privadas del país para que promuevan convocatorias que permitan la presentación de propuestas de diseño de proyectos de diferentes escalas y usos.

“Para las empresas o instituciones es factible realizar concursos porque de ahí surgen múltiples enfoques sobre un proyecto, teniendo la posibilidad de escoger el que mejor responda a sus necesidades y garantizar su calidad”, explica Samaniego.

Señala, además, que los concursos de arquitectura son una oportunidad de aportar a la planificación y desarrollo urbano, trabajando de manera interdisciplinaria y asegurando la transparencia en las decisiones y contrataciones.

Para finalizar, destaca que el CAE/CAE-P es un organismo con experiencia en concursos y puede ser considerado un aliado estratégico. Cuenta con un Reglamento de Concursos de Arquitectura y Diseño Urbano, publicado en el año 2000, y ha impulsado varias convocatorias, permitiendo la democratización de estas dinámicas y del propio ejercicio.

 

Nota publicada también en la Revista Mundo Constructor >> VER AQUÍ